Editorial | Transparencia, ante todo

Los cortes de energía eléctrica son una molestia para todos, pero más cuando escasea la información por parte del Gobierno, y si la hay, no es precisa, pues esto genera más incertidumbre. La población necesita datos concretos en cuanto a horarios y cuál será la duración prevista de la emergencia, para en función de ello tomar medidas, algunas de las cuales requerirán inversión y financiamiento, de modo que puedan seguir desarrollando sus actividades con relativa normalidad. Son más que justificadas las quejas ciudadanas por la imprecisión de la información y el incumplimiento de los horarios de los apagones en algunos sectores. Y no puede decírsele a los ecuatorianos que todo está en manos de la naturaleza y que casi dependemos de la buena voluntad de San Pedro.

Hay que implementar estrategias a corto plazo para al menos paliar la crisis, y avanzar con las soluciones a mediano y largo plazo para desterrar los apagones del futuro del país. La ministra de Ambiente ha dado un primer paso al agilizar la entrega de licencias ambientales para proyectos de generación de energía limpia. Falta que otros nudos burocráticos en otras carteras y niveles de la gestión pública se vayan desenredando para que las inversiones sigan ingresando. En este momento de oscuridad, la transparencia y la información concreta y continua son indispensables.