Las arepas de zapallo tienen más de 200 años de historia en Patate

Las arepas de zapallo se han convertido en el bocadillo único y especial en Patate. Este plato, que podría tener más de 200 años de historia, habría nacido con Simón Bolívar.

Según Felipe Cepeda, fraile franciscano, señala que cuando estaba en la gesta libertaria, Bolívar pasó por este territorio de la provincia de Tungurahua y descansó con su tropa en lo que hoy es Patate.

Con hambre y cansancio pidieron harina de maíz para que elaboren las tradicionales arepas venezolanas, pero nunca se imaginó que en este poblado le iban a dar su toque único. La arepa es un alimento de origen precolombino que es popular en los países sudamericanos como Venezuela, Colombia e incluso Bolivia.

Sin embargo, en Tungurahua hay una versión diferente y propia de este bocadillo. Los habitantes pusieron su toque original, aprovechando la cosecha y las bondades energéticas del zapallo y se las presentaron a Bolívar.

(Los invitamos también a leer: SalasakaLa, la tierra de ritos y costumbres milenarias tendrá a su Inti Ñusta )

Colocaron con la harina de maíz el zapallo, queso y panela. Este bocadillo gustó a Bolívar y a los soldados y desde ahí la arepa de zapallo de Patate se ha convertido en su plato insigne.

Mariana Cisneros es una de las que heredó esta tradición. Lo aprendió de su suegra hace 40 años. Cuenta que en la familia de su esposo elaboran la arepa por más de 100 años.

‘Las delicias de Patate’, que es el local donde Mariana oferta su panecillo ancestral, se las prepara a diario. Un día antes se pica el zapallo y se lo pone a cocinar con especias aromáticas, mantequilla, manteca y otros ingredientes. Cuando está frío se incorpora la harina, el queso y la panela que le dan un toque especial. 

En el ‘Valle de la Eterna Primavera’, como es conocido Patate, se degusta la arepa con la chicha de uva, que también la preparan en la localidad. Este bocadillo de manera tradicional se lo coloca en las hojas de achira y se las cocina en horno a leña.

 Mariana asegura que en la faena participa toda la familia porque es un bocadillo que se hereda a la familia para que la tradición se mantenga. José Valencia, habitante de Patate, asegura que quien llega al cantón lo primero que degusta son las arepas. También recalcó que este dulce sobrevive por el legado familiar y son pocas que la mantienen.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!