
Ceremonia en Sacachún honra al sol y fortalece la tradición ancestral Guancavilca
Una ceremonia ancestral en honor al equinoccio de primavera
La comuna Sacachún, ubicada al sur de la provincia de Santa Elena, fue escenario de una ceremonia ancestral de florecimiento en honor al equinoccio de primavera. El evento se dio el pasado jueves 20 de marzo 2025 junto al monumento de San Biritute, una figura de profundo significado espiritual y cultural para la región peninsular.
En el acto participaron jóvenes nativos de la comunidad junto a estudiantes universitarios, quienes, con gran solemnidad formaron parte de las reverencias de gratitud a la tierra por sus frutos.
Sacahún exhortan a los visitantes a vivir una experiencia enriquecedora, tanto cultural como espiritualmente, en este sitio lleno de tradición y misticismo.
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Durante el rito, se ofrecieron alimentos ancestrales en señal de gratitud a la Madre Tierra por su abundancia y generosidad. Este acto simboliza la armonía entre los pueblos originarios y la naturaleza, fortaleciendo el vínculo con las tradiciones transmitidas de generación en generación.

Uno de los momentos más destacados de la ceremonia fue la aplicación de medicina ancestral a través de limpias energéticas, cuyo propósito fue alejar las malas energías y renovar el espíritu de los asistentes. Esta práctica, profundamente arraigada en la cultura nativa, sigue siendo un pilar fundamental de su identidad.
Félix Lavayen, director de la Casa de la Cultura de Santa Elena, explica que estos rituales se realizaban en la antigüedad para marcar las cuatro estaciones del año, llevándose a cabo en los meses de marzo, junio, septiembre y diciembre.
Fortalecer las creencias ancestrales
“Se percibía un cambio en la estación, el clima comenzaba a comportarse de manera diferente, y se creía que el nuevo tiempo traía energías propicias para la sanación y el renacimiento. Asimismo, coincidía con el período de siembra”, dice Lavayen.

Desde hace 15 años, la comunidad de Sacachún ha promovido esta actividad con el propósito de fortalecer las creencias ancestrales de sus pobladores, quienes se reconocen como descendientes de los Guancavilcas.
Gilberto Lino, directivo de Sacachún, destaca que los nativos del lugar realizan este acto en agradecimiento al sol por sus beneficios. Dice que en tiempos de antaños, los primeros habitantes organizaban sus actividades en función de la posición del astro rey y de la luna.
“El sol era nuestro reloj. Mis abuelos sabían la hora exacta solo con mirar su posición en el cielo. También, según el movimiento del sol, determinaban los días propicios para la cosecha”, expresa Lino.
Los visitantes disfrutaron de la gastronomía tradicional de la región, con platos elaborados a base de ingredientes autóctonos que permitieron degustar los sabores ancestrales preservados a lo largo del tiempo.

Los pobladores de Sacachún extienden la invitación a quienes deseen conocer más sobre la historia del lugar, donde se venera a San Biritute, considerado el ‘Dios de la Fertilidad’.
El sonido del caracol es parte de la ceremonia ancestral en dónde los pobladores le rinden pleitesía a sus dioses. El acto es de gran reverencia y mucha solemnidad.
Paulina León, representante del área de Turismo, Cultura y Patrimonio de la Prefectura de Santa Elena, resalta la disposición de los comuneros de Sacachún para participar en los actos. Señala que el acto de florecimiento sirve como un impulso turístico y económico para la comunidad.
“Es una oportunidad única para valorar y vivir la interculturalidad, rescatando las costumbres de los pueblos ancestrales y fomentando el respeto por la sabiduría de sus prácticas espirituales y gastronómicas”, dice León.
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