Los emprendimientos en Ambato se fortalecen con las mujeres
Ocho de cada diez que se registran en la ciudad son liderados por ellas
En Ambato, las mujeres se han convertido en el pilar fundamental de los emprendimientos locales. Ocho de cada diez emprendimientos que existen en la ciudad lo lideran las mujeres.
“Esto se debe a una necesidad de independizarse y apoyar la economía del hogar y buscan la manera de emprender”, recalcó Cecilia Chacón, directora de Cultura de la Municipalidad.
Agregó que 80 de cada 100 mujeres en Tungurahua se dedican a la manufactura, artesanía, gastronomía, textilería, producción y agricultura.
Para iniciar o fortalecer sus negocios, las mujeres se capacitan a través de diferentes entidades que les brindan el acompañamiento, entre ellas el Gobierno Provincial, la Municipalidad de Ambato, la Corporación para el Desarrollo de Ambato (Corpoambato), entre otras.
Corpoambato, por ejemplo, ha destinado $ 30.000 para las capacitaciones y cuenta con el apoyo del Gobierno de Canadá. Cada una de las instituciones les ayudan a la promoción mediante las redes sociales o en diferentes ferias de la provincia y el país.
Las historias de emprendedoras
Entre estos espacios figura Pamela Delgado. No pasa de los 40 años, estudió Derecho en una universidad y hace siete años empezó a elaborar los alfajores. Inició como una actividad relajante, que compartía con sus hijos, pero hace tres años esta actividad se convirtió en su microempresa y principal fuente de ingreso para su hogar.
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Solo ella sostiene su casa y asegura que emprender no le ha resultado fácil. Su marca es ‘Te lo Mereces’, alfajores elaborados con sabores como la máchica, chocolate, maracuyá.
Pamela y su marca han logrado dos medallas de oro en los Premios Gourmet Ecuador con sus alfajores artesanales de máchica y chocolate ambateño y medalla de bronce con su alfajor clásico de dulce de leche.
Mientras que Gabriela Frías es otra de las mujeres que aprovecha los productos de la región para darles valor agregado. Su emprendimiento tiene la marca Crunnys que empezó hace dos años, ya que no tenía un empleo fijo. Con varias asesorías, decidió llevar a la industrialización la deshidratación de frutas.
“Al ver que mucha fruta se perdía, decidí sacarle el mejor de los provechos para aprovechar toda la producción”, expresó.
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