Quevedo: pacientes renales, en el olvido por falta de pagos

Las historias en los exteriores de una clínica de diálisis, ubicada en la avenida Walter Andrade son interminables. Son más de 300 pacientes que acuden constantemente al lugar. Esta enfermedad para muchos se ha convertido en una “tragedia” hasta el punto de indicar, que por falta de pagos, “les toca pasar penurias cuando llegan a hacerse el tratamiento”.

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Galo Burgos, de 61 años, es uno de los pacientes que conversó con EXPRESO sobre el tema y expuso su sentir: “No es justo que por falta de insumos mi vida corra el riesgo”. Este paciente se suelta en llanto al recordar que tiene que cambiarse una prótesis y no lo puede hacer porque en las clínicas no hay los recursos suficientes para reemplazarlas.

Junto a su esposa viajan cada semana desde el cantón Valencia. Apenas llega les toca esperar que los atienda, provocándoles desesperación, por su condición la persona termina hinchándose. El pilar fundamental es su esposa quien poco a poco sostiene a su ‘amado’ ante la llegada de una ceguera. Lorena Molina, su esposa, lo acompaña a cada sesión. 

El hombre detalló que desde el 2019, que se enfermó, le toca padecer más de lo normal por la falta de recursos. “Solo esperamos que el Gobierno se conduela para que puedan enviar los recursos y así no se extinga nuestras vidas rápidamente”, expuso Molina.

Ángel Macías Sánchez, director administrativo de Dialilife, una de las clínicas de diálisis en Quevedo, mencionó que Los Ríos es considerada “capital renal del Ecuador. En Quevedo hay un promedio de 700 pacientes con insuficiencia renal. Detalló que todo empezó agudizarse luego de pandemia y que actualmente el Ministerio de Salud Pública le debe a su clínica alrededor de 4 millones de dólares y el IESS cerca de 2 millones y esto sería desde junio de 2023”. 

Adicional, el titular de la clínica explicó que la deuda asciende por los servicios de diálisis, en la cual ellos tienen alrededor de 360 pacientes.  “El paciente tiene que completar un paquete de 12 a 14 sesiones, en la cual cada usuario tendría que tener 1.456 dólares mensuales”, alega. 

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“Nosotros actualmente tenemos cerradas las puertas. Nadie nos quiere dar créditos por las carteras que están vencidas y eso nos agobia en gran manera, ya que para seguir trabajando debemos tener insumos y no lo tenemos”, expresó Macías. 

Además, señaló que reconocen que el Estado no podría pagar la deuda, pero con un 30 % se podría paliar algunas de ellas o con un convenio de pago se lograría regular la situación. Sin embargo, la institución recibió alrededor de 300 mil dólares que no les ha alcanzado para cubrir el número de pacientes a los que brindan sus servicios. 

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En el mes de abril se vieron obligados a parar las diálisis de forma bisemanal con una estrategia para poder ahorrar insumos, sin embargo, hay pacientes que viven momentos críticos. “Quiero aclarar que no se trata de un negociado, ya que hay una tabla impuesta por el Estado la cual regimos”, acotó el administrador. 

Ante esta situación, el asambleísta Camilo Salinas detalló que por parte de la comisión de salud se está pidiendo comparecencia permanentemente y han obtenido respuesta para las dializadoras. “Hay fiscalización y control permanente sobre el tema. Pero no estamos de acuerdo que se quite el tratamiento (...)”, puntualizó.

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