El año nuevo se recibió con viudas, monigotes y pirotecnia
Pese a las restricciones del COE, los quiteños recibieron el 2022 con tradiciones
15 minutos duraron, en varios sectores de Quito, los estallidos y las luces en el cielo. Comenzaron antes de la medianoche y se extendieron hasta ya entrado el 2022. En medio de abrazos, música y bebidas, los quiteños recibieron el año nuevo.
Atrás quedaron las prohibiciones del Comité de Operaciones de Emergencia (COE), las familias quemaron monigotes dentro de sus casas, en conjuntos habitacionales y, en algunos casos, en la vía pública.
‘Baños’ y ‘limpias’ para el 2022
Leer másQuemaron a políticos y a muñecos que representaban al coronavirus, salieron las viudas e hicieron testamentos, una tradición que se practica desde hace tres siglos.
De hecho, la historia de este tipo de festejo se remonta a la epidemia de la fiebre amarilla, que se había expandido por Guayaquil en 1843. La enfermedad causó más de 2.800 muertes y 8.000 infectados. Como medida sanitaria y como un ritual de purificación, los vecinos de la ciudad quemaron en hogueras, en el último día de 1843, la ropa de los enfermos rellena de paja, papel o madera, explica Héctor López Molina, investigador quiteño, apasionado por la historia y la arquitectura patrimonial de su ciudad.
López explica que desde los 90 se comenzaron a confeccionar los años viejos de figuras de acción, dibujos animados, personajes famosos, pero que los preferidos siguen siendo los políticos ecuatorianos.
Tras esta noche de celebración, los quiteños disfrutaron de una mañana soleada, un cielo azúl sin rastro de nubes y un inusual silencio producto de calles vacías.
¡Feliz 2022!