Un bus de pasajeros del aeropuerto de Tababela ardió en llamas
El automotor no superó la revisión técnica vehicular en Quito, desde 2018, finalmente la aprobó en Cayambe, en enero de este año, y ayer se incendió
Ayer, a las 11:00, un bus de servicio urbano que cubría la ruta hacia el aeropuerto de Tababela se incendió cerca del intercambiador de Carcelén, en el norte de Quito.
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Leer másEl automotor se consumió en segundos, según los internautas que twitearon el hecho, pero gracias a la inmediata alerta que dieron los moradores del sitio, el cuerpo de Bomberos acudió en segundos y sofocó el incendio.
Según reportaron los casacas rojas, no hubo personas heridas ni fallecidas. Solo la pérdida parcial del vehículo.
El tránsito se vio afectado, ya que el siniestro se produjo en una vía de ágil circulación. La paralización duró unos minutos mientras removían el pesado aparato un costado de la vía para permitir el paso a los demás automóviles.
A través de la página de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) se obtuvo el historial de revisiones técnicas del carro siniestrado, el mismo que no cuenta con la aprobación de la misma desde el 31 de diciembre de 2018.
Asimismo se constató que ya realizó el pago de la matricula, el 24 de enero de este año.
Este Diario se comunicó con un vocero de la AMT, quien mencionó que según su sistema, este vehículo aprobó la revisión en enero de 2022 en el Gobierno Autónomo Descentralizado de Cayambe, y que el permiso de operaciones lo designa la ANT, por ser un “transporte por cuenta propia”.
"Por ser un vehículo de transporte por cuenta propia, es decir, que satisface necesidades de
movilización de personas o bienes dentro del ámbito de las actividades comerciales relacionadas con la producción exclusiva de las personas naturales y/o jurídicas (...), nosotros no tenemos competencia, sino la Agencia Nacional de Tránsito (ANT)", se indicó en un comunicado.
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Leer másAl respecto, desde el departamento de comunicación de la ANT se indicó que tampoco pueden dar respuestas ante este hecho porque la AMT es la encargada de proporcionar información.
Hasta el cierre de la publicación, aún se desconocían las causas o fallas mecánicas que provocaron el flagelo.