Cumbayá: una línea rápida es la eventual solución a la conexión

Antes, ir a Cumbayá y a Tumbaco era escapar de la rutina para pasar un apacible momento lejos del estrés y el caos que suele reinar en las calles del área urbana del Distrito Metropolitano de Quito.

Pero las cosas cambiaron cuando aumentó la población en el Valle y, en consecuencia, también la necesidad de servicios y diversión. Ximena Vargas creció entre el centro y el norte de Quito, pero ahora vive junto a su familia en Tumbaco. Si bien disfruta la cotidianidad en esa zona, nota cómo los problemas de movilidad han crecido.

Según su criterio, el aumento de restaurantes y bares en Cumbayá causa “una congestión terrible desde el centro hasta Tumbaco. No hay suficientes estacionamientos y la gente se parquea de lado y lado en las calles así sean de doble vía”.

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Para la residente, también es difícil conectarse con Quito, porque la avenida Interoceánica “es peligrosa, tiene un alto número de accidentes, no hay controles de velocidad y el acceso al túnel Guayasamín tiene contraflujo. Eso impide la movilidad en ciertos horarios. Porque no se puede bajar por ahí a Cumbayá en las mañanas o subir a Quito en las tardes. La situación se agravó cuando estuvo cerrada la vía De los Conquistadores”.

Estos y otros temas forman parte del Plan Maestro de Movilidad 2023-2042, que empezó a diseñarse durante la alcaldía de Jorge Yunda, cuando Guillermo Abad era secretario de Movilidad. En esa época contrataron a la consultora de origen mexicano Cal y Mayor, que tiene experiencia en ingeniería de tránsito y transporte para el estudio.

Se dio ese paso por la necesidad de una hoja de ruta para poder operar en la ciudad y dejar de dar tiros al aire, dice Abad. Antes había un plan maestro en marcha, pero que no incluía al Metro. Entonces no tenía sentido, pues era importante pensar en la movilidad hacia el futuro. Inicialmente, el Plan Maestro debía correr desde 2022, pero la coyuntura política congeló el proceso. En la alcaldía de Pabel Muñoz se retomó la iniciativa y el documento fue aprobado en febrero último.

Es un plan de movilidad sostenible que abarca todo el Distrito. Cerca de 80.000 viajes al día se hacen desde Cumbayá y Tumbaco hacia Quito, explica Abad. Son entre 60.000 y 65.000 vehículos que viajan porque los centros de trabajo o estudios de la gente que se mudó a esos sectores sigue estando en el área urbana. En promedio hacen 1,3 viajes por persona cada jornada. La idea del plan es incentivar a la comunidad a usar más transporte público, medios alternativos de movilidad como bicicleta y compartir vehículos, porque en Quito se calcula que hay una ocupación de 1,2 personas en cada auto particular.

Para enfrentar esa problemática y el caos que se forma para subir y bajar desde y hacia el valle de Tumbaco, el documento contempla implementar una línea BRT (bus rapid transit) con la ruta La Carolina-Cumbayá-Tumbaco-Tababela. Esto se complementaría con estaciones de transferencia en esas localidades. La idea es que sea un sistema similar al Trole o la Ecovía y sería uno de los 12 que se recomiendan en el plan. Por la necesidad, se encuentra en la lista de prioridades de corto plazo, pero debido a la inversión que se requiere, este proyecto se planea para mediano y largo plazo.

El mediano plazo apunta entre 2027 y 2032, con un costo de $ 1’132.852 y el largo se extiende hasta 2042, por un valor de $ 412’307.067.

Por eso, dice Abad, se hablaría de una implementación paulatina: infraestructura básica a corto plazo y con el transcurso del tiempo, construcción de paradas intermedias, estaciones y otros servicios específicos.

Esta solución es mucho más barata que construir otros sistemas como una línea de metro o sistemas de cables, asegura, pero puede ser complementario y hacer un ‘mix’ con esas y otras modalidades de transporte.

El plan apunta a estos sistemas, tanto en la ciudad como en los valles, por la cantidad de vehículos privados que circulan, porque la gente confunde comodidad con productividad, agrega. Según el documento, este y otros proyectos apuntan a un financiamiento mediante alianzas público-privadas, que incluya innovación y tecnología para mejorar el servicio de transporte y volverlo más eficiente. Se trata de mejorar la conectividad y accesibilidad del territorio en todo el Distrito y así consolidar el sistema de transporte público, como una red integral en la que la gente viaje largas distancias de forma sencilla y más rápida.

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