En Cumbayá luchan para preservar su único ‘pulmón verde’
El bosque de San Francisco de Pinsha tiene 42 hectáreas. En al menos siete de ellas se está construyendo una UVC
Como una victoria recibieron en Cumbayá la resolución del Municipio que ratifica el estado de bosque protector a una zona que está ubicada en San Francisco de Pinsha, un barrio centenario por el que atravesaba la línea del ferrocarril.
Al sector se llega por una larga vía por la que pasaba el tren y que ahora está pavimentada. El lugar contrasta con el centro de la parroquia de Cumbayá y sus alrededores que están invadidos por el ruido y la contaminación.
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Leer másLuis Reinoso ha vivido desde pequeño en el lugar. Con nostalgia recuerda cuando de niño jugaba con sus amigos cerca de las rieles del tren y también se adentraban en el bosque para esconderse. “Es un lugar que siempre hemos cuidado”, dice.
Ahora saca a pastorear a sus 80 ovejas y en la zona es común ver a personas paseando a sus mascotas o simplemente caminando y disfrutando del aire puro. También es una zona muy visitada por ciclistas que aprovechan la ruta para hacer downhill.
Gustavo Valdez, parte del Frente de Defensa del Parque Metropolitano Cumbayá, señala que ha sido una lucha de cuatro años para evitar que el bosque se convierta en otra ‘selva de cemento’. Aunque, la victoria no es completa debido a que en al menos siete de las 42 hectáreas que tiene, actualmente se construye una Unidad de Vigilancia Comunitaria (UVC).
Valdez menciona que en la administración de Mauricio Rodas, como parte del desarrollo del plan especial San Juan Alto, se lo definió como bosque protector, lo que coincidía con la propuesta de los moradores para que sea un espacio natural para la comunidad, sin embargo, en otra administración fue donado al Ministerio de Gobierno, que a su vez lo entregó a la Policía Nacional.
Conformación del frente de defensa
Pero los vecinos no estaban dispuestos a perder al “único pulmón del valle de Cumbayá”, parroquia que tiene cerca de 250.000 habitantes, por lo que se movilizaron de todas las formas. Incluso Damiano, autor de temas como ‘Yo soy ecuatoriano’, compuso una canción para el bosque.
Todas las acciones que habían emprendido prácticamente quedaron en la nada y finalmente el predio se entregó a la Policía y, de cierto modo, los vecinos se resignaron.
Pero en 2023, Nancy Naranjo, coordinadora del Frente, envió una carta al alcalde Pabel Muñoz, en donde le expresó su preocupación por el proyecto de construir la UVC en 13 hectáreas del bosque y también recordó la posibilidad que se planteó en reuniones de una permuta entre el Municipio y el Ministerio de Gobierno para que la Policía cuente con un área similar y en un lugar más óptimo para sus requerimientos.
La respuesta llegó desde la Secretaría de Hábitat y Ordenamiento Territorial en noviembre de 2024. En el documento se detalla que el predio está dentro Plan Parcial de Expansión Urbana San Juan de Cumbayá, en donde se prevé la incorporación del nuevo Parque Metropolitano de Cumbayá.
“A pesar de no recibir las 42 hectáreas como era el propósito, el Municipio hizo conciencia y nos ha entregado 35 hectáreas en beneficio de toda la comunidad del valle de Tumbaco”, dijo Naranjo en una entrevista con un medio digital.
Espacios necesarios
Valdez destaca la unidad de los moradores y especialmente de mujeres como Naranjo y Mercedes Erazo, que no claudicaron en la lucha para proteger el bosque.
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Leer másPara Juan Fernando Serrano, otro integrante del Frente, el logro alcanzado es solo el inicio y asegura que seguirán presionando para que el espacio no se pierda y se concrete el ofrecimiento. Una de las preocupaciones es el tiempo de un año que se dispuso para que la entidad responsable presente el plan de gestión para la transformación en parques metropolitanos a las áreas que ya están definidas.
“Ha sido una lucha de cuatro años. Necesitamos estos espacios de recreación, es el único pulmón verde que tenemos en el valle”, recalca.
Para esta semana está prevista la entrega de oficios al Alcalde, a la Secretaría de Hábitat y al GAD parroquial para solventar temas como la definición del área que quedará de bosque, además que se tome en cuenta a la comunidad y que “bajo ningún concepto se desarrolle un proyecto inmobiliario en la zona”, resalta Valdez.
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