Quito

Vecinos Chaquiñán
El padre de Jesús Guachamín usa bastón y en ocasiones silla de ruedas. El hombre levantó una rampa afuera de su domicilio.Foto: Ángelo Chamba

Cumbayá: Vecinos de El Chaquiñán claman por una intervención

A finales de julio mantuvieron una reunión con autoridades. Se llegó a acuerdos que aún no se concretan, aseguran moradores

José Guachamín, de 86 años, camina a paso lento con la ayuda de un bastón. Sale de su casa y baja por una rampa que su hijo Jesús levantó para que se le facilite el trayecto. Además, porque hay ocasiones en que debe recurrir a una silla de ruedas. Por esa acción recibió una sanción, por edificar sin una licencia metropolitana urbanística o permiso de la autoridad competente. Su vivienda está ubicada en el Chaquiñán, un camino histórico que atraviesa Cumbayá, Tumbaco y Puembo.

Aunque no está de acuerdo debido a que el hombre considera que la rampa es necesaria para que su padre se movilice, acepta la multa, pero cuestiona que así como se hacen controles, también es imprescindible que se preste atención a las necesidades urgentes que hay en el sector en temas de poda de árboles, iluminación y seguridad.

Le invitamos a leer: Quito: Residentes de Tumbaco piden se adoquine el Pasaje Río Chone

Los agentes se colocarán en la calle Manuela Sáenz, en Cumbayá, para gestionar el tránsito y evitar la congestión vehicular.

Quito: quejas por congestión en Cumbayá; AMT realiza controles

Leer más

La reunión que mantuvieron en julio pasado con el GAD de Cumbayá, la Empresa de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop) y la Policía para tratar las condiciones del Chaquiñán y otros espacios fue una señal de esperanza para mejorar la situación.

Sin embargo, asegura Guachamín, poco o nada ha cambiado. Entre los acuerdos que llegaron el día de la reunión estaban realizar un recorrido para la revisión de los árboles dimensionando las necesidades de cada tramo que corresponde al sector. También se acordó la repotenciación de luminarias y que se conformen brigadas de inspección.

Guachamín, quien es presidente del Comité Promejoras, menciona que de los acuerdos, solo uno se ha cumplido de manera parcial.

Caminar por la ruta del Chaquiñán es adentrarse en un mundo paralelo al de la ciudad, que contrasta con el ruido y la contaminación. A lo largo del trayecto hay decenas de árboles, muchos de ellos han crecido tanto que cubren la luz del alumbrado público.

Poda de árboles

Jimmy Silva, morador de la zona, señala que hace algunas semanas llegó una brigada de la Epmmop a podar los árboles. Pero fueron pocos, dice. El 9 de octubre de 2024, otro vecino, por su cuenta pagó la tala porque sentía temor que el ejemplar caiga sobre su casa.

“Cortaron solo tres árboles y ahí quedó todo, algunos ya se han caído, es un peligro”, sostiene.

EXPRESO consultó a la Epmmop sobre el plan que ejecuta y señaló que los trabajos se realizan de manera constante en la ruta Ecológica El Chaquiñán. Según la entidad municipal, está previsto que la intervención continúe la próxima semana, o la subsiguiente, ya que también hay otras zonas y otros parques que requieren mantenimiento.

Piden más patrullajes

En cuanto a los otros acuerdos sobre seguridad y señalización no hay ningún avance, indica Guachamín. Están a la espera de que el GAD de Cumbayá les dé una audiencia para trabajar en mesas junto con la Policía debido a que consideran necesario que haya más patrullajes.

Vecinos Chaquiñán
El Chaquiñán es el único sendero natural en la parroquia. Con los años se ha vuelto inseguro y peligroso, dicen los vecinos.Foto: Ángelo Chamba

Wilfrido Mieles fue víctima de un ataque hace tres meses y estuvo internado en el hospital. “He vivido aquí toda mi vida y es lamentable que un lugar tan tranquilo ahora esté lleno de inseguridad, con delincuencia, libadores y hasta los ciclistas se ponen más bravos cuando uno se les pide que no vayan tan rápido. Vienen a competir y no a hacer deporte”, relata.

Otro de los problemas es el estado del trayecto, en el que los mismos ciclistas se han accidentado, asegura Mieles. Hace unos meses, en un tramo se colocó un cono naranja de advertencia. En el lugar, las ruedas de las bicicletas de dos jóvenes derraparon en una piedra suelta, causando su caída. Los moradores comentan que ese tipo de incidentes son frecuentes, por lo que también solicitan que se coloque señalización, debido a que por ahí caminan adultos mayores, niños, mascotas.

Guachamín lamenta que este espacio emblemático y por el que se movilizan más de 30.000 usuarios mensualmente se haya transformado en un punto inseguro y desatendido. A esto se suma que hay personas que consumen bebidas alcohólicas y otras sustancias. “Necesitamos que escuchen, que no se lancen la pelotita, que haya más control y también patrullajes”, insiste.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!