¿A qué se debe la presencia de militares en Puembo?
Los robos a negocios y el crimen de un joven levantan las alertas Una brigada militar llegó la semana pasada a la parroquia
En Puembo, una de las ocho parroquias de Tumbaco, se niegan a convertirse en un lugar inseguro y a vivir en medio de la zozobra. Tatiana Cóndor, de 28 años, habita allí desde que era niña, en una zona que es considerada de paz.
Sin embargo, en los últimos meses ha escuchado de robos a locales comerciales y a estudiantes. Añade que son frecuentes las estafas con transferencias bancarias falsas. Pero el caso que más alarmó a la comunidad fue el crimen de un joven de 22 años en Mangahuantag, que se ubica a dos kilómetros del coliseo de Puembo.
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La noche del pasado 25 de febrero, en las calles Teófilo Elías y Urcesino Baquero, la víctima esperaba el bus junto a su novia cuando fue baleado por un hombre que, según la Policía, se movilizaba a pie y vestía ropa oscura.
Sobre el hecho se manejaban dos hipótesis: un intento de robo o un sicariato, aunque a la víctima no se le llevaron sus pertenencias. Por este hecho, no hay ningún detenido hasta el momento.
En Puembo, según el censo de 2022, hay 18.000 habitantes. Gabriel Tinajero, presidente del Gobierno Parroquial, señala que cuentan con una Unidad de Policía Comunitaria (UPC), con 10 efectivos y un patrullero, lo que resulta insuficiente para atender a toda la parroquia.
Por ello, y como parte de una acción preventiva, la Tenencia Política, a través del Ministerio de Gobierno, gestionó la llegada de 50 uniformados del Batallón de Infantería 38 de Ambato.
Arribaron la semana pasada y se instalaron en el coliseo de Puembo. En el lugar se colocaron camas, y algunos moradores donaron colchones para los militares, dice Tinajero.
Desde su llegada han realizado entre cuatro y cinco operativos diarios de control de armas, municiones y explosivos en Puembo.
Un militar explica que se ubican en distintos puntos de la parroquia y revisan a todos los vehículos que circulan por las vías. En la mañana del 19 de marzo se ubicaron en la calle Santiago Apóstol, donde hay decenas de negocios. El uniformado mencionó que hasta este miércoles no se encontraron novedades en la zona.
Preocupación en moradores
Eduardo Escobar, dueño de un minimarket en esa avenida, ve positivos los controles militares, pues le dan una sensación de seguridad, más cuando ha escuchado de robos en motos y el reciente crimen del joven.
Tinajero recalca que el objetivo es reforzar la seguridad. “No es que la zona sea insegura, pero ninguna medida está de más cuando se trata de prevenir”, afirma.
Liliana Andrango concuerda con Escobar. Sin embargo, pide que los operativos se hagan en lugares estratégicos. Esto debido a que cuando las personas se dan cuenta que están los militares, en el ingreso a Puembo hay una arteria que se desvía hacia los Arrayanes, y por allí evaden los controles. También sugiere que los operativos sean constantes y no esporádicos.
“Desde hace cinco meses, Puembo, que se consideraba una zona tranquila, ha sido víctima de la delincuencia, con robos a negocios y a estudiantes de colegios por parte de chicos que les amenazan”, denuncia.
Problemas con libadores
Para Tinajero, uno de los problemas que restan tiempo a la policía es la atención de incivilidades. Cita como ejemplo los libadores que se toman las calles del centro de Puembo, que luego generan peleas y otras alertas que son atendidas por los uniformados. “Eso de alguna manera merma la atención en otras situaciones que surgen en la parroquia”, advierte.
Pese a ese inconveniente, el funcionario menciona que como Gobierno Parroquial han trabajado en conjunto con la Policía Nacional y con los pobladores en el tema de seguridad, con la creación de chats y alarmas comunitarias. Además, desde hace un año cuentan con siete cámaras ancladas al ECU-911.
Operativos en Tumbaco Cumbayá y Pifo
Además de Puembo, los operativos militares se realizan en otras parroquias como Tumbaco, Cumbayá y Pifo. En cada equipo de combate están 20 uniformados y un oficial.
El militar del Batallón de Infantería 38 de Ambato comenta que durante los controles en esos sectores han encontrado armamento y municiones dentro de vehículos; así como sustancias sujetas a fiscalización, en pequeñas cantidades, en parques y salidas de colegios.
Señaló que se quedarán por un tiempo indefinido, dependiendo de cómo avance la situación ante posibles actos delincuenciales.
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