La duda ciudadana pesa más que las ofertas de campaña
Tras un año del aluvión en La Gasca, los candidatos a alcalde de Quito ofrecen recuperar las quebradas. Los residentes ya no creer en esas promesas
Propuestas aceleradas. Poco estudiadas. Repetitivas e incluso inútiles. Así califican los residentes de los barrios La Comuna y La Gasca a los planes de trabajo con los que los 12 candidatos a alcalde de Quito pretenden llegar al máximo sillón municipal, este domingo 5 de febrero, día de las elecciones.
Con el corazón en la zona cero del aluvión
Leer másTras cumplirse un año del aluvión (31 de enero de 2022) que asoló a estos dos sectores del noroccidente de la capital y dejó como saldo 29 personas fallecidas y 52 heridas, los habitantes, sobrevivientes y testigos de este fatal evento ponen en tela de juicio las alternativas que exhiben los candidatos para rescatar las quebradas y evitar un acontecimiento similar a futuro.
Asimismo, algunos habitantes se atreven a dar soluciones aplicables, a partir de la realidad que han vivido durante años, desde este sitio conocido como “la zona cero”.
Para Nathaly Ortega, secretaria de la asamblea barrial y del comité de Seguridad de La Gasca- Pambachupa, los candidatos a la Alcaldía deberían manejar planes de trabajo sólidos y reales para recuperar las zonas de riesgo y evitar una desgracia de estas magnitudes.
El trabajo coordinado y en equipo con la comunidad barrial, es otro elemento que poco se considera por los políticos, principalmente porque, según ella, solo quienes viven en el lugar de los hechos y palpan día tras día los problemas pueden dar soluciones reales.
Con una minga se recuerda el aluvión en La Gasca
Leer más“Del dicho al hecho hay mucho trecho. Quien tenga un plan sólido y centrado en recuperar las laderas y quebradas sería el candidato que nos dé una esperanza. Concuerdo con algunos aspirantes en que se debe reubicar a todas las familias que viven en la faldas de las montañas, al filo de quebradas o en sitios que son altamente peligrosos. Las campañas de manejo de desechos son clave para evitar otro episodio más”, agregó.
Entre las propuestas, a nivel general se habla de intervenir estos espacios periódicamente para su mantenimiento, monitorearlos con drones para valorar su estado, colocar alarmas para evacuar en una emergencia y también está la limpieza de las quebradas y laderas para evitar su acumulación y desplome en tiempo invernal.
Cuando Gladys de Montalvo escucha atenta parte de estos ofrecimientos de campaña simplemente hace una mueca y sube su ceja derecha en señal de duda y sospecha.
La Comuna: mascotas también fueron las víctimas del aluvión
Leer másLa credibilidad que tiene en los políticos es nula. Ha perdido toda la confianza y espeta que muchos “ofrecen el oro y el moro, pero para hacer... poco”.
Según la mujer, la vigilancia permanente de las quebradas, principalmente de aquellas que impliquen riesgo debe ser permanente y no solo ejecutarse cuando ya suceden catástrofes.
“Las charlas para que la gente no bote basura en esos despeñaderos es muy importante. Necesitamos hacer conciencia sino las desgracias también son por nuestra culpa, por el desorden y falta de educación”.
La tarde de la tragedia descendió desde la quebrada El Tejado, sobre el barrio La Comuna, un caudal de lodo, basura, troncos, árboles y otros desechos que en su paso arrastraron a vehículos, contenedores de basura y las víctimas que murieron, así como a las otras que salieron heridas.
Según el Municipio de Quito, en total se retiró 1.944 metros cúbicos de este material. Los trabajos de remediación tardaron cerca de tres meses. Pero el miedo ante lo vivido no ha cesado en el sitio, pese a que desde la Secretaría de Salud se dio atención psicológica a 973 personas que se vieron afectadas por la magnitud de la desgracia.
Rosana Sandoval por ejemplo contó que cuando llueve, revive claramente lo que padeció ese 31 de enero de 2022.
Las víctimas del aluvión de La Comuna claman atención
Leer másSandoval estaba a punto de cerrar su negocio de tintorería cuando la luz se suspendió y un estruendo fuerte la alertó de la bajada de la avalancha de escombros.
“Estaba con mi hija pequeña y en mi intento por cerrar la puerta enrollable, se trabó. Al final logré encerrarme, mientras el lodo llegaba. Frente a mí murieron ahogados dos jóvenes que fueron arrastrados en el interior de un auto. Fue horrible. En la ventana de mi negocio se incrustó un árbol. Temía por mi hija. Por mí. Todo fue muy rápido”, añade.
Debido a la premura con la que se desencadenan los fenómenos naturales, Sandoval duda sobre la efectividad de la propuesta de un par de candidatos sobre monitorear con drones estos sitios de desfogue de agua, así como de la aplicación de alarmas de evacuación.
“Esa tarde no nos dio tiempo para reaccionar, peor nos va a dar para huir. Necesitamos que el nuevo alcalde en realidad se apersone, no solo de esta quebrada, sino de las otras 300 que hay en Quito. Que recorra y vea dónde está el origen y en qué condiciones están. Que ordene se hagan mantenimientos preventivos frecuentes y no solo posmuertes. Sobre la basura también debemos hacer algo en comunidad para mejorar, pero sobre las viviendas que se levantan en zonas peligrosas también debe intervenir el Municipio”, finalizó.