
Geomantos no detienen los deslizamientos: quiteños piden muros de contención en Nayón
Vecinos exigen muros de contención en la vía a Nayón en lugar de geomantos
En respuesta a los recientes movimientos de tierra registrados en varias zonas del Distrito Metropolitano, el Municipio de Quito ejecutó medidas preventivas con el objetivo de reducir riesgos y garantizar la seguridad vial.
Trabajos realizados en época invernal
Los trabajos se concentraron en puntos críticos como la antigua vía a Nayón, Guápulo y el entorno del túnel Guayasamín, donde se colocaron geomantos para controlar la erosión de los taludes.
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En la antigua vía a Nayón, una zona especialmente vulnerable por su topografía, se reportaron dos gradualmente de consideración que obligaron a evacuar más de 800 metros cúbicos de tierra y escombros.
Sin embargo, estas acciones han generado malestar entre los ciudadanos, quienes consideran que son insuficientes. Varios moradores y usuarios frecuentes de la vía exigen la construcción de muros de contención que den mayor seguridad.
“La colocación de geomantos no es una solución definitiva. Aquí lo que necesitamos son muros de contención porque los deslizamientos son constantes”, reclamó Magaly Cisneros, quien transita a diario por esta vía. La ciudadana explicó que los derrumbes ocurridos la semana pasada afectó gravemente la movilidad en la zona. “El tránsito colapsó y el tiempo de traslado se duplicó. Fue un caos total”, agregó.
Limpieza de cunetas
Los estudiantes universitarios, principales usuarios de esta arteria vial que conecta el sector de la avenida Granados con Nayón, también expresaron su malestar. Milton Andrade, estudiante de medicina, expresó su preocupación por la falta de soluciones estructurales a largo plazo.
Paralelamente, la Epmmop realizó durante los 365 días del año labores de limpieza en cunetas viales (a los costados de las calles), cunetas de coronación (en la parte alta de los taludes) y cruces viales (canalizaciones bajo las vías), para facilitar la evacuación de agua lluvia. Hasta la fecha, se han intervenido 45.762 metros lineales en todo el Distrito.
No obstante, prácticas como arrojar basura o escombros en estos sistemas afectan gravemente su funcionamiento. Estas acciones provocan taponamientos que derivan en desbordamientos de agua, daños a taludes y colapsos viales, especialmente durante el invierno.