Guápulo, el rincón bohemio que clama por su reactivación

Pasadas las 17:30, en Quito, los ‘after office’ se encienden. La música suena en los parlantes y las bebidas espirituosas están a la orden del día.

En La Floresta y la González Suárez, al centro norte de la urbe, este es un rito semanal que arranca a partir del miércoles. Y así también solía ser un par de cuadras más abajo, en el emblemático barrio de Guápulo.

Conocido como el rincón bohemio de la capital, el barrio era el sitio predilecto de músicos y artistas, quienes montaban ahí sus talleres y espacios de creación. En las noches, las peñas y los bares se atestaban de gente que acudía a la zona para disfrutar de la noche.

Lea también: Quito: Cierre en Caspigasí por cortes de agua

Esa época, sin embargo, hoy parece ser un capítulo cerrado en el pasado del histórico barrio.

“Ya no es como antes”, dice Diana Guerrero, propietaria del bar Palo Santo, que funciona en la localidad desde hace diecinueve años. “El primer bajón vino con la pandemia, y luego con la inseguridad. Desde entonces, hemos perdido quizás un 60 % de los visitantes que solíamos tener”, asegura.

Esta, indica que mientras que en el pasado su bar y los otros cuatro que funcionan en el lugar contaban con un intenso movimiento semanal y cuantiosas visitas turísticas, hoy en día el único día rentable para los establecimientos es el viernes.

“Entre semana cerramos a las nueve, máximo a las diez. Es una pena, porque a pesar de ser un barrio mágico, con una vista hermosa y que aún es seguro, es como que hemos quedado en el olvido”, señala.

Así también lo afirma Fidel Barzola, propietario del Café Guápulo, uno de los más antiguos del barrio.

El día de este recorrido, dos clientas tomaban café en el lugar. Era el único grupo que el local había recibido a lo largo de la tarde. “Los viernes, y a veces los sábados, son los días en que tenemos clientela fija. El resto del tiempo es muy variable”, asegura.

Para este, la reducción de la acogida en Guápulo no solo se debe a la situación económica y de seguridad que atraviesa el país, sino a una reducción en las propuestas turísticas que se llevaban a cabo en la zona.

“Hubo una época en la que había iniciativas locales, desde el comité barrial y desde el Municipio. Los grupos turísticos venían con sus agencias, había mucha publicidad. Eso se ha reducido al mínimo”, dice.

Le invitamos a leer: El vandalismo al tren del Metro de Quito genera dudas sobre la seguridad

Guerrero añade que hace un par de años, los domingos, el comité barrial organizaba las ‘caminatas de Guápulo’, que iniciaban en el mirador y recorrían los íconos del barrio, incluyendo los bares y restaurantes. “Ese tipo de propuestas ya no existen”, dice.

Doris San Martín, administradora de Anaké, otro bar restaurante de la zona, cree que la publicidad es esencial para enganchar a los visitantes más jóvenes.

“Un comentario que siempre escuchamos es que llegan hasta Anaké por recomendaciones de otras personas o por redes sociales, no porque hayan escuchado de Guápulo antes como un destino de vida nocturna. Lo ideal sería que Guápulo tuviera el tipo de promoción que tiene, por ejemplo, Las Peñas en Guayaquil”, señala.

Para María Carrera, vecina de la localidad, la reactivación barrial debe ser un tema de mesas de trabajo con el Cabildo.

“Somos una comunidad unida, pero envejecida. La mayoría ya somos personas de la tercera edad, y eso limita nuestras posibilidades. Sin embargo, debe haber acercamientos para que Guápulo no quede en el olvido, lejos del crecimiento del resto de Quito”, dice.

Esta añade que entre las propuestas de promoción se debe incluir los íconos de la localidad, como la iglesia, que data de 1620, y el museo.

“Vemos que se promocionan mucho, desde el Municipio, a los museo del centro, las iglesias del centro, y está bien, pero también se debe dar visibilidad a otros sectores”, comenta.

La falta de parqueo es un problema

Los moradores y propietarios de negocios aseguran que la seguridad no es un problema que aqueja en exceso al barrio. Aseguran que hay estrategias de seguridad en pie y que tienen una buena relación con la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) del sector.

No obstante, todos concuerdan en que una traba para la reactivación es la falta de parqueo en las estrechas calles del barrio colonial, y la falta de conectividad con el transporte público. “Sin duda, son temas que se deben abordar de urgencia”, indica Carrera.

¿Cómo se llega a Guápulo?

Conexión con Quito: Aunque Guápulo conserva su encanto de pequeño pueblo, está bien conectado con el resto de Quito, facilitando el acceso para residentes y visitantes.

Transporte: Se puede llegar a Guápulo en auto, taxi o incluso caminando desde el centro de Quito, aprovechando las vistas y el paisaje a lo largo del camino.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!