Inseguridad en Quito: Estas son las 7 zonas críticas del Valle de Tumbaco por robos
Estas son las siete zonas del Valle en Quito convertidas en epicentro de robos en el transporte público
“No podemos hablar, tenemos miedo a represalias”. Este es el sentir de los conductores que consultó EXPRESO ante los robos registrados en las unidades que cubren la ruta Quito-Tumbaco.
Y es que la inseguridad en los autobuses que transitan por esa ruta (en ambos sentidos) se ha convertido en una preocupación creciente para pasajeros y trabajadores del transporte. Los asaltos violentos, cada vez más frecuentes, han dejado heridos y sembrado el temor entre quienes utilizan este servicio esencial.
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En menos de siete días se registraron dos asaltos violentos en autobuses de esta ruta. El pasado 13 de diciembre, las cámaras de seguridad de una unidad que se dirigía a la parroquia Pifo captaron uno de los ataques. Tres hombres y una mujer subieron al vehículo lleno de pasajeros y, en cuestión de minutos, despojaron a los usuarios de celulares, dinero y mochilas.
Mientras los hombres huyeron por la puerta delantera, la mujer timbró para salir por la trasera. Días antes, el 2 de diciembre, un hecho similar ocurrió en un autobús que salía de la terminal de la Río Coca. Este ataque dejó cinco personas heridas.
Carlos Puente, presidente de la Asociación de Autobuses Sotranor, afirmó que los asaltos se han vuelto más violentos y frecuentes. “Antes eran los carteristas, que aprovechaban el tumulto para sustraer celulares, pero ahora los delincuentes están armados y no dudan en amenazar o herir a los pasajeros y conductores”, reveló.
Aracely Granizo, usuaria habitual de esta ruta, confirma el aumento de la inseguridad. Destaca que aunque el intercambiador de Cumbayá solía contar con vigilancia policial, esta ha disminuido notablemente. “Ahora, cada vez que subo al bus debo esconder mi celular y evitar llamar la atención”, comentó.
La asociación ha identificado siete puntos conflictivos donde se concentran los asaltos: el sector de Villavega, Santa María de Tumbaco, paseo San Francisco, mirador de Miravalle, redondel de El Ciclista, intercambiador de Cumbayá ‘El Cóndor’ y El Cebollar. En algunos de estos lugares, como los exteriores del centro comercial de Cumbayá, la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) suele estar cerrada, convirtiéndose en un “imán” para la delincuencia.
Estas son las zonas donde se han registrado el mayor número de robos
Puente también señaló que de las 240 unidades, la mayoría carece de cámaras de seguridad que sean funcionales. “Las pocas que tenemos tienen más de nueve años de antigüedad. Planeamos invertir en nuevas tecnologías, pero necesitamos apoyo del ECU-911 para que estas herramientas puedan integrarse al sistema”, especificó. Cada unidad requeriría de dos a tres cámaras, con una inversión estimada de 1.500 dólares por micro.
El miedo también ha alcanzado a los trabajadores del transporte. Anita (nombre protegido), empleada de una cooperativa de autobuses, admitió que los conductores temen denunciar debido a las amenazas de represalias por parte de los delincuentes. “Ya saben quiénes somos, conocen las líneas y hasta a los propietarios. Un compañero tuvo que dejar su trabajo por miedo”, relató. Los delincuentes suelen camuflarse entre los pasajeros y, en trayectos largos, obligan al conductor a detenerse en lugares aislados para huir, señala.
Durante un recorrido realizado por EXPRESO, conductores y ayudantes, aunque prefirieron mantener el anonimato, coincidieron en un punto crucial: la urgente necesidad de reforzar la presencia policial en las zonas donde se han registrado los asaltos.
Los ataques no solo generan pérdidas materiales, sino también afectaciones psicológicas. “Muchos conductores han quedado en estado de shock después de un asalto. Son padres de familia que trabajan para llevar el sustento a casa”, agregó Puente
El representante del transporte espera que con las imágenes de los videos se pueda dar con los responsables del hecho. Actualmente están realizando las investigaciones del caso.
Se intensifican los operativos, según la Policía
El coronel Paúl Enríquez, jefe del Distrito de Policía de Tumbaco, manifestó que han intensificado los patrullajes nocturnos en puntos críticos como la Ruta Viva, Pifo y Tababela. Además, se han establecido chats comunitarios entre transportistas y policías para una respuesta rápida ante emergencias.
Sin embargo, Enríquez resaltó la importancia de que los conductores respeten las paradas autorizadas. “Podemos asignar agentes en las paradas, pero si los conductores se detienen en lugares no oficiales, nuestro trabajo pierde efectividad”, explicó.
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