Una labor ambiciosa que se quedó en el discurso
La pandemia complicó los planes de movilidad trazados para este año. Los intentos por reactivar la economía local han dado resultados mínimos
En todas las plazas y parques de la capital se lo lee: “Quito grande otra vez”. La versión criolla del eslogan trumpiano que llevó a Jorge Yunda a la Alcaldía el año pasado venía acompañado de un ambicioso plan de gobierno que incluía fortalecer y rediseñar la movilidad, el turismo, la conservación ecológica y la integración barrial.
Pero los avances en este proyecto no solo se vieron mermados sino totalmente detenidos producto de la pandemia y de una gestión que se ha visto manchada por denuncias de sobreprecios y corrupción en el tratamiento de la emergencia sanitaria, y que para 2021 ha perdido cerca de la mitad de su presupuesto.
El objetivo principal para 2020, la apertura del Metro de Quito se vio paralizada y aún no se concreta. Así mismo, los numerosos intentos por reactivar el turismo y la economía local han dado mínimos resultados, en medio de unas cifras de inseguridad que están al alza, pese al resideño de los planes de seguridad.
Un infrenable alza en cifras de violencia
Con el fin del confinamiento, el índice de delitos en la capital comenzó a subir, principalmente el robo de autos, locales comerciales y a personas, que han superado las cifras de 2019 con creces. En noviembre se intensificó un plan de control integrado entre la Policía Nacional, las Fuerzas Armadas y el Municipio de Quito y que reforzará los controles en las zonas comerciales de la urbe y zonas conflictivas como Quitumbe, Calderón y el Centro Histórico. Sin embargo, el Plan de Seguridad Ciudadana planteado por la Alcaldía no termina de ejecutarse a cabalidad.
La apertura del Metro de Quito no se concretó, la ciclovía sí
Una de cal y otra de arena. El principal proyecto municipal para 2020, la apertura del Metro de Quito no se concretó, pero sí lo hizo la muy esperada ciclovía. En junio, el Cabildo habilitó 62,7 kilómetros de rutas, que inicia en la intersección de las avenidas Isaac Albéniz y Amazonas y se extiende en sentido norte-sur hasta la av. Eloy Alfaro.
La movilidad verde era uno de los puntales del proyecto que, a fines de noviembre, sumó otro triunfo: la aprobación de la ordenanza que permitió el alza del pasaje a $ 0,30 y la implementación del nuevo plan de movilidad, que redistribuirá las rutas de buses para que cubran al menos un 97 % de la ciudad.
En cuanto al Metro, en septiembre, los técnicos de la empresa municipal indicaron que se necesitaban $ 35 millones adicionales para cumplir con las modificaciones necesarias en la edificación. Pese a ello, el alcalde de la urbe se comprometió a que el servicio se inauguraría en mayo de 2021.
Trabajar en medio de los recortes
La fundación Teatro Sucre, los museos de la ciudad y los grupos culturales que recibían fondos municipales vieron una fuerte afectación a su funcionamiento por atrasos en los pagos y recortes presupuestarios que reducen cerca de un 30 % de sus asignaciones.
Lo mismo sucedió con algunos de los programas de inclusión social que llevaba a cabo el patronato San José, incluido los guagua centros que dejó sin sitios de cuidado a más de ocho mil niños. La situación contrastó con los más de $ 500.000 que se invirtieron en las fiestas (virtuales) de la ciudad, lo que generó fuertes críticas.
Una respuesta rápida manchada por denuncias de sobreprecios y corrupción
El aumento del número de camas hospitalarias, el cierre de parques, plazas y comercios: la Alcaldía reaccionó rápido ante el alza de casos de COVID-19. Y las medidas dieron resultados, al menos por unos meses, hasta que la reapertura del distrito y la necesidad de empleo generaron un incremento en la cifra de contagios que hasta ahora mantiene las camas de las Unidades de Cuidados Intensivas con un 97 % de ocupación. Así mismo, en mayo se denunció una supuesta adquisición con sobreprecio de 100.000 pruebas PCR que involucraban al exsecretario de Salud y a seis funcionarios más.
Aun así, desde entonces, y con otro lote de pruebas adquiridas, el Cabildo ha realizado campañas de testeo gratuito en numerosos barrios de la capital, entre ellos sitios donde se registra el mayor número de contagios, como Cotocollao y Quitumbe.
Adicionalmente, las distintas secretarías comerciales han implementado planes de reactivación para negocios y para el turismo, con resultados mínimos.
Según Raúl García, director de la Cámara de Turismo de Pichincha, esto se debe a que los planes no han venido acompañados ni de incentivos ni modificaciones a la movilidad.
“Hay un feriado y lo primero que hacen es restringir la movilidad por placas. ¿Cómo se supone que las personas viajen a los destinos rurales, o incluso dentro de la misma ciudad, si no pueden usar su vehículo?”, reflexionó.
Las restricciones en el aforo y en el consumo de alcohol también han generado una fuerte afectación a bares y restaurantes, de los cuales el 40 % ha cerrado sus puertas. Para José Tomalá, director de la Asociación de Comerciantes Mayo 24, no existe una reactivación integral. “Se debe hacer un plan integral que sume movilidad y seguridad”.
