Quito: Lavadoras ilegales generan un impacto negativo en el ambiente
La AMC inició 49 procesos sancionatorios por esta actividad ilícita
Por tercera ocasión, las lavadoras de carros ubicadas en La Gatazo, en el sur de Quito, fueron intervenidas por la Agencia Metropolitana de Control (AMC), la Empresa Metropolitana de Agua Potable, la Secretaría de Ambiente y la Policía Nacional. Estas lavadoras han sido reincidentes en operar sin las licencias de funcionamiento requeridas, lo que pone en evidencia una falta de regulación que genera serios problemas ambientales.
A pesar de que se han iniciado sanciones a 49 personas y se han clausurado 10 locales por no contar con las licencias adecuadas, este negocio continúa proliferando en la zona.
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Impacto ambiental
Pablo Osorio, coordinador de operativos de la AMC, explicó que estos establecimientos son pequeños cuartos que carecen de la infraestructura necesaria para realizar la actividad de manera responsable. “Lo hacen en el espacio público porque es más barato”, añadió.
El problema radica en que operar estas lavadoras en espacios públicos no solo es ilegal, sino que también tiene consecuencias ambientales devastadoras. Osorio señala que es esencial contar con una infraestructura adecuada, que incluya sumideros diseñados para el manejo de residuos. “Lavar los carros en la vereda provoca que los hidrocarburos se mezclen con el agua, lo que contamina nuestras fuentes hídricas”, advirtió.
Requisitos para obtener el permiso
Además, para llevar a cabo una actividad económica en el espacio público, es necesario obtener un permiso regulado por el Municipio de Quito. Celso Aguilar, funcionario de la AMC, enfatizó que “el espacio que tienen en los locales no es suficiente para un carro, y el negocio debe establecerse en un predio privado”.
Pamela León, jefe de control de consumos de Epmaps, indicó que en estos locales se evidencia un consumo indebido de agua y daños en los medidores. “En nuestros operativos verificamos el consumo y la correcta funcionalidad de los medidores”, afirmó. Los vecinos han reportado estos establecimientos, alertando sobre el desperdicio de agua en un contexto donde Quito ha enfrentado sequías severas en los últimos meses.
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