Los mini-monigotes, el regalo perfecto para despedir el 2023
Ana Montoya elabora alrededor de 1.000 muñecos en miniatura desde julio. Esta iniciativa contribuye con el medio ambiente y mantiene la tradición
Ana María Montoya es una emprendedora que aprovechó la forma de despedir el año en el país para su negocio. Su emprendimiento, Mini Muñecos Años Viejos, ofrece una alternativa más sostenible y divertida a los monigotes tradicionales.
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Leer más“La idea surgió con la pandemia”, cuenta Ana María. “Muchas personas no les gustan los monigotes gigantes, porque no son amigables con el medioambiente y además son difíciles de transportar”. Los monigotes miniatura miden unos 20 centímetros de alto. Están hechos de materiales reciclados. Cada monigote es único y está lleno de detalles, que lo convierten en una verdadera obra de arte.
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“Me gusta que mis monigotes sean divertidos y originales”, dice Ana María. “Quiero que la gente los disfrute, se los quede como recuerdo o que los quemen en compañía de familias y amigos”. Estos muñecos de tela se pueden personalizar a gusto del cliente. El color de la piel del mini-muñeco, el peinado, los accesorios y hasta la profesión que representa queda al gusto de la persona. “Los clientes solo tienen que pedirlo y nosotros lo hacemos”, dice Ana María.
Los mini-monigotes se han convertido en una tendencia en Quito. Cada año, son más personas que los prefieren para despedir el año viejo. “Los monigotes han viajado a todo el país y también hacemos envíos al exterior”, dice Ana María.
Sobre una mesa de madera y con decoraciones navideñas, Ana María coloca los muñecos, son cientos de caritas que sonríen y da la idea de que están saludando. Estos pequeños se empiezan a confeccionar desde mitad de año, casi desde julio. Y es que su proceso es minucioso. Ana María relata que con su equipo de seis personas trabajan duro para prepararlos para la noche de fin de año. “Se confeccionan entre 1.000 muñecos”, menciona.
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Leer másSu casa se convierte en un pequeño taller, lleno de telas, bolsas y paquetes que contienen los otros artículos para armar el kit. El grupo de artesanos trabaja contra reloj para elaborar los muñecos. El proceso comienza con un boceto, en el que se diseña el cuerpo con las características que pida el cliente.
“Una vez que tenemos el boceto, comenzamos a confeccionar la vestimenta”, explica Ana María. En esta fase, tres personas se dedican a armar la ropa con telas de diferentes colores y diseños. Otra persona se dedica a confeccionar los gorritos de los muñecos, cuidando cada detalle. “Ponemos mucho amor en este trabajo, queremos que los muñecos queden perfectos”, afirma la emprendedora.
Los ojos y los bigotes se pegan con delicadeza. “Los bigotes pueden ser grandes o pequeños, según el gusto del cliente”, dice Ana. Para esta temporada fría, los monigotes también tienen su ponchito. Lo confeccionan con tela abrigada para que los niños puedan jugar con ellos sin pasar frío. Y así van dando vida a los muñecos. Lo que no puede faltar durante la confección es la sonrisa que está dibujada en cada uno.
Mientras los artesanos confeccionan, Ana María se encarga de recibir los pedidos, cotizar y empacar los kits para niños y adultos. Cada kit de monigote de miniaturas incluye una bolsa decorativa ecológica, el muñeco, sahumerio, hoja de instrucciones, una minihoja para escribir los propósitos para el 2024, el alcohol, el shot de licor para hacer el brindis.
Pero eso no es todo, viene con alcohol y fósforos para prender el muñeco. Una vez que se quema, la ceniza no se desecha se la puede mezclar con tierra y sembrar una semilla de girasol que también viene con el kit. Para Ana María, la planta simboliza una nueva existencia y un nuevo objetivo para el año.
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Leer másPara los niños, el paquete contiene el muñeco y los complementos para que tengan el muñeco, tales como la ropa, los lentes y el gorrito.
Ana María dice que esta opción es ideal para quienes buscan un regalo original y personalizado para sus seres queridos. Los muñecos de Navidad son una tradición que se remonta a siglos atrás, y son un símbolo de alegría y esperanza. Además, la bolsa o la cajita personalizada es un detalle adicional que seguro será apreciado por el destinatario. Los precios son cómodos, cada kit cuesta 11 dólares. Se puede enviar en una bolsa ecológica o en una cajita personalizada que contiene una botella de vino, sales de baño y jabón que sirve como un obsequio para cerrar el 2023.
- Emprendimiento. El kit de monigote miniatura cuesta 11 dólares. Puede ser personalizado por el cliente y no contiene químicos.
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