Quito: Nueva denuncia de daño al patrimonio cultural en San Antonio

El 7 de septiembre de 2024, en su cuenta de X (antes Twitter), Richard Dávila, publicó el daño que habrían sufrido dos de las plataformas de piedra prehispánica o discos líticos que están Caspigasí, en el sector de San Antonio de Pichincha, al noroccidente de Quito. 

Según la publicación, uno de los discos líticos fue parcialmente afectado por la construcción de un paso carrozable. "¿Cuánto más hay que esperar para que se ponga en valor el patrimonio cultural prehispánico? ¿Dónde están las autoridades de San Antonio de Pichincha y Quito que permiten su destrucción?", cuestionó Dávila. 

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Hasta el cierre de esta publicación las autoridades no se han pronunciado sobre este reciente hecho. 

Esta denuncia se sumó a otra que se dio a conocer la semana pasada. En redes sociales circularon fotografías de la destrucción del círculo lítico ubicado en la quebrada Colorada, al noroccidente de Pichincha, en Rumicucho.

El bien patrimonial prehispánico tenía un diseño en mosaico, conformado por piedras dispuestas en un sitio arqueológico inventariado. 

Una cerca habría sido tumbada el viernes 30 de agosto y el círculo arrasado con maquinaria pesada, según constaba en un video difundido por la cuenta @CabildoCivico. “Ha sido estudiado por investigadores del mundo por su relación astronómica” y “es parte de un complejo sistema de calendarios luni-solares para la agricultura”, publicaron.

El sitio está ubicado en la parroquia San Antonio de Pichincha y la competencia directa de la salvaguarda de ese sitio es del Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP).

Destrucción del patrimonio arqueológico

La entidad técnica municipal realizó el 4 de septiembre de 2024 una inspección con sus propios técnicos. En un comunicado, publicado en su cuenta de X (antes Twitter), el IMP señaló que se evidenció que una de las dueñas intervino el área con maquinaria pesada, destruyendo alrededor del 75 % del patrimonio arqueológico.

La entidad recalcó que la acción contraviene lo establecido en la Ley Orgánica de Cultura vigente, sobre la obligación de protección de bienes patrimoniales y protección de los objetos y sitios arqueológicos y paleontológicos, lo que es causal de sanciones.

“Sin perjuicio de las competencias del Ministerio de Cultura y Patrimonio, la Alcaldía, través de los órganos competentes, suspendió los trabajos y tomará las acciones de conformidad con el ordenamiento jurídico nacional y metropolitano”, menciona el comunicado.

La sanción por dañar o destruir un bien patrimonial puede ir de uno a tres años de privación de libertad, según el artículo 237 del Código Integral Penal. Además, se pueden aplicar multas administrativas.

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