Una ordenanza le pone el pie a la reactivación de la Plaza Foch

Una misión casi imposible. Abrir un negocio en la zona de La Mariscal (centro de Quito) se ha vuelto una tarea difícil, lo cual ha complicado la reactivación de uno de los sectores turísticos emblemáticos de la capital, que fue golpeado tras la pandemia de COVID-19.

Una ordenanza municipal de septiembre de 2021 fija la necesidad de una “preexistencia” para rentar locales comerciales. Es decir, si una persona quiere abrir un restaurante cerca a la Plaza Foch lo debe hacer en un local en donde haya funcionado un restaurante anteriormente y cuente con un certificado que avale ese anterior funcionamiento, es decir, un papel denominado preexistencia, explicó Mónica Heller, empresaria quiteña del sector turístico.

“Necesita un documento que pruebe que en el local donde usted va a abrir un negocio cualquiera ya existía ese negocio”, señaló Heller.

Si bien la ordenanza que aprueba la actualización del Plan Metropolitano de Desarrollo y Ordenamiento Territorial y la Aprobación del Plan de Uso y Gestión del Suelo del Distrito Metropolitano de Quito es de 2021, entró en vigencia en noviembre de 2022, aseguró Andrés Coral, administrador de la Zona Especial Turística La Mariscal.

Y hay otros problemas. La ordenanza también establece ciertos parámetros para el funcionamiento de bares, discotecas y karaokes, como estar a más de 200 metros de distancia de universidades y hospitales o 100 metros de escuelas.

Dentro de esas disposiciones hay un requisito que complica aún más a los negocios de La Mariscal, que establece que negocios de ese tipo, como bares, karaokes o discotecas, deben estar a más de 50 metros de distancia entre sí. “Con eso ya se complicó a los nuevos bares y discotecas”, dijo Coral.

Es decir, una nueva discoteca, bar o karaoke no puede estar cerca (más de 50 metros) de otro negocio similar y alejado de hospitales o casas de estudio.

Cerca de La Mariscal opera el hospital Pediátrico Baca Ortiz, con lo cual complica el trámite para la apertura de nuevos negocios en la zona, explicó el administrador de la Zona Especial Turística La Mariscal.

“Es carente de todo sentido comercial y económico. Esto demuestra una falta de conocimiento del Concejo de la lógica comercial de la ciudad”, señaló Heller.

Ante la situación, empresarios han buscado acercarse al Concejo Metropolitano de Quito, pero no han sido escuchados hasta el momento.

Coral señaló que su planteamiento es crear un plan especial para La Mariscal, en el que se excluyan algunos requerimientos para los negocios del sector.

Desde el Concejo Municipal, se ha buscado implementar algunas iniciativas para la reactivación de la zona con pocos resultados. El sector empresarial señala que uno de los problemas del país es la engorrosa tramitología para iniciar negocios y con este tipo de medidas se agrava aún más la situación.

Las empresas en Ecuador destinan, en promedio, 395 horas al año o lo que es igual a 17 días para el cumplimiento de trámites, según el Índice de Burocracia en América Latina. De acuerdo el reporte, las compañías tienen que realizar entre 38 y 63 trámites en el país.

Quito ha sido una de las ciudades más afectadas por la crisis económica y esa situación se ha evidenciado en el desempleo. Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), la tasa de desempleo en Quito fue de 8,5 % en el tercer trimestre de 2022. El indicador tiene una gran diferencia de la situación en otras urbes del país, como Guayaquil (4,0 %) o Cuenca (5,7 %).

Si se compara la tasa de desempleo en la capital frente a 2021, hay mejoras, pero sigue siendo el porcentaje más alto por ciudades.

Desempleo. La cifra de desempleo en Quito se ubicó en 8,5 % al tercer trimestre de 2022, según cifras del INEC, mayor a Guayaquil y Cuenca.