Los planes en caso de erupción del Cotopaxi están en pañales
Con el volcán en alerta amarilla, las entidades estatales y locales homologan mapas, datos, revisan albergues En la población aún hay desconocimiento
La ruta de escape para un centenar de niños que estudian en la escuela Rotary Club, en Sangolquí, es cruzar un pequeño río y subir hacia un refugio ubicado en el cerro Jatumpungo.
Si hoy erupciona el volcán Cotopaxi, los pequeños y las maestras tendrán 30 minutos para llegar a zona segura. El problema es que el puente para cruzar el río no está listo. Y ante el riesgo de erupción, los propios moradores pidieron 2 dólares por vivienda para comprar troncos y construir ellos mismos.
No es el único problema. María Fernanda Cajas, directora de la escuela Rotary Club dice que ha recibido tres informaciones diferentes sobre la ruta de escape. Desde el COE de Sangolquí le han dicho que su refugio está a 300 metros, en la Unidad Educativa Galileo Galilei. Desde el dispensario médico le han informado que en realidad la escuela debe evacuar hacia San Fernando. Y desde el Distrito de Educación que debe llevar a los niños a Jatumpungo.
“¡Qué mismo! Que nos digan qué debemos hacer, por dónde hay que seguir y también pedimos que haya una mejor coordinación”, expresa la maestra.
En este momento, con el Cotopaxi en alerta amarilla, uno de los mayores retos de las entidades estatales, locales y organizaciones humanitarias es la coordinación adecuada.
Julián Tucumbi, coordinador zonal 3 de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, indica que las diferentes entidades se encuentran homologando mapas, sistemas de sirenas, datos y gráficos. “La idea es que todos los mapas, en todos lados, tengan los mismos objetos. Los primeros mapas saldrán aquí, en Latacunga”.
El funcionario reconoció que todas las entidades están recién levantando la información para delinear líneas de acción coordinada. Por ejemplo, los albergues en los cantones de Salcedo, Pujilí, Saquisilí y Latacunga, en Cotopaxi; Píllaro y Ambato, en Tungurahua, no están listos aún, pues cada gobierno cantonal debe adecuarlo para que reciban la calificación de albergue. “Para que puedan operar deben tener acceso a baterías sanitarias, energía eléctrica y otras condiciones”, agrega Tucumbi.
El volcán Cotopaxi nuevamente emana gases y ceniza hacia el noroccidente
Leer másEl objetivo es que hasta final de este mes se pueda contar con 150 albergues en óptimas condiciones en esos cantones y se compren más kits de dormir (colchones, frazadas, etc.).
Para el Instituto Geofísico, el pronóstico más probable en el corto plazo es que el volcán mantenga una actividad moderada. Significa que se podrán observar columnas eruptivas unos 4 kilómetros sobre el cráter y caídas de ceniza a nivel cantonal (principalmente Latacunga y Mejía). Es posible que la caída de ceniza y las fuertes lluvias formen lahares pequeños en las zonas altas del volcán.
“Pero nadie puede decir qué día va a erupcionar. Por eso nos preparamos”, dice Gustavo Iturralde, comandante de la Brigada Patria del Ejército.
El miércoles 8 de febrero pasado, el oficial dirigió una reunión con varias entidades que trabajan en Cotopaxi para pulir los planes de contingencia.
Asistieron representantes de la Gobernación, el Ministerio de Agricultura, de Inclusión Económica y Social, de Ganadería; la Cruz Roja y más.
En la cita se establecieron necesidades. Por ejemplo, que las empresas de agua y luz de los cantones garanticen los servicios básicos; que hace falta sillas de ruedas para personas con movilidad reducida, que se requieren de zonas de pastoreo para evacuar al ganado de miles de personas y que se defina cómo se actuará en caso de que la gente no quiera salir de su casa.
En este punto, el oficial es claro: “amparados en una declaratoria de emergencia y teniendo en mente que debemos garantizar su vida, los deberemos sacar obligados. Porque tenemos el deber de protegerlos”, dice el comandante.
Para el oficial, mientras cada día se alerta de caída de ceniza leve hay la oportunidad para prepararse. “Lo importante es que actuemos de forma coordinada. Que todos tengamos claros los roles, qué hacer y nos anticipemos a los escenarios”.
- Peligro. La erupción puede dar lugar a la formación de enormes lahares en zonas densamente pobladas, como Mulaló y Latacunga, y el Valle de los Chillos.