Taxistas en Quito toman medidas para protegerse de la delincuencia
Los conductores han colocado rejas metálicas en las unidades y varios prefieren no trabajar en la noche
Apenas eran las 07:00 de la mañana cuando cuatro hombres a bordo de dos motocicletas se acercan a dos taxis que están estacionados en la calle Isla Marchena, en el norte de la ciudad. Dos de los sujetos se bajan y apuntan con armas a los conductores. Intimidándolos les piden los celulares y dinero.
Héctor Orejuela, dirigente del Comité de Seguridad de El Inca, comenta que el hecho, que sucedió hace dos semanas, quedó grabado en una de las cámaras de seguridad de la zona. Las víctimas son dos choferes que prestan el servicio a los vecinos del sector desde las 05:45 hasta las 08:00.
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Leer más“El barrio se ha vuelto muy inseguro. Hace un mes también asaltaron un local comercial en la madrugada. Los dueños decidieron irse y no abrir más el negocio”, dice.
En el gremio del taxismo, el temor por los frecuentes asaltos es constante. Paola Rosado, que trabaja en una cooperativa de Quito, señala que desde 2019, antes de la pandemia, ya se registraban robo de las unidades e incluso el secuestro de los conductores.
Con el tiempo la situación es más grave, asegura. Recuerda el reciente caso de un compañero al que lo buscaron por un día y medio. Cuando encontraron su cuerpo, estaba amarrado y maniatado en un terreno en una curva de Santa Rosa de Cutuglahua, en el sur de la ciudad.
Optan por vender unidades
Trabajar en la noche prácticamente es imposible. El esposo de Rosado velaba toda la noche y madrugada, pero debido a la inseguridad ya no lo hacía y más bien decidió vender la unidad. “Vendimos el carro porque ya no era rentable, ya no podíamos vivir de esto”, sostiene.
A otro compañero de Rosado, quien prefirió omitir su nombre, lo intentaron ahorcar para robarle hace dos semanas. Ocurrió en la Mena Dos, en el sur de Quito, en la mañana.
Tras este violento ataque, el hombre decidió colocar una reja metálica que cubre todo el asiento del conductor. En la cooperativa, al menos cinco socios tomaron la misma medida como una manera de protegerse de la delincuencia.
“Con la pandemia se pusieron mamparas en las unidades, pero en la actualidad son una especie de cárcel. Eso no le va salvar que le apuñalen o le disparen, pero sí de que les ahorquen. Ya nos han reportado algunos casos", afirma Rosado.
Reportes a diario en los chats
Carlos Brunis, presidente de la Federación de transporte terrestre de Pichincha y gerente de la Unión de Cooperativas de Taxis de Pichincha, menciona que no han levantado cifras de cuántos socios han sido víctimas de la delincuencia, sin embargo, menciona que el tema de la inseguridad está peor.
Jhonatan Yánez
En los chats que usan los choferes, a diario se reportan robos de dinero o de celulares, en el mejor de los casos, indica, Brunis, porque en otros se llevan los vehículos o los secuestran. “Los compañeros se ven en la necesidad de colocar rejillas para de alguna manera protegerse”, menciona Brunis.
El dirigente señala que han insistido para que se los incluya en las mesas de trabajo que el Gobierno mantiene con los transportistas y la Federación Nacional, pero la respuesta no fue favorable. “La inseguridad no solo está en las carreteras, también la vivimos cada día en las calles de la ciudad”, finaliza.
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