El rey Felipe VI a Iberoamérica: "Es más lo que nos une que lo que nos separa"
El monarca destaca la unidad iberoamericana en una cumbre marcada por la baja asistencia de líderes
En la XXIX Cumbre Iberoamericana, celebrada en Cuenca, Ecuador, el rey Felipe VI enfatizó la importancia de la unidad entre los países de habla hispana y portuguesa, destacando que "es mucho más lo que nos une que lo que nos separa".
Este mensaje cobra especial relevancia en un evento que ha contado con una representación histórica mínima de líderes, siendo el anfitrión Daniel Noboa, presidente ecuatoriano, el único mandatario latinoamericano presente.
Un llamado a la superación de diferencias
Felipe VI destacó que las discrepancias entre los países iberoamericanos son naturales, dada la riqueza y diversidad de sus relaciones históricas, pero insistió en que "la grandeza como comunidad es saber superar las diferencias".
El monarca subrayó la necesidad de seguir fortaleciendo los principios y valores compartidos, incluso en un contexto global que calificó como "de gran complejidad para el multilateralismo".
El rey también recordó los logros alcanzados en las más de tres décadas de historia de estas cumbres, instando a preservar esos consensos y avanzar juntos hacia nuevos desafíos: "Sigamos haciendo Iberoamérica", animó a los participantes.
España, anfitrión de la Cumbre Iberoamericana 2026
En la cumbre, España asumió oficialmente la Secretaría Pro Tempore, convirtiéndose en la sede del encuentro en 2026.
Felipe VI expresó su agradecimiento por el apoyo unánime de los países iberoamericanos, comprometiéndose a ejercer esta responsabilidad con dedicación; "Creemos profundamente en el camino recorrido, pero somos conscientes de lo mucho que queda por hacer", afirmó.
El monarca también aprovechó la ocasión para agradecer los mensajes de apoyo y solidaridad recibidos tras las recientes inundaciones en España, conocidas como DANA, que han afectado a muchas familias, incluidas aquellas con vínculos iberoamericanos.
La cumbre, marcada por una participación inusualmente baja, contó únicamente con la presencia del rey, el presidente de Portugal, el jefe de Gobierno de Andorra y el anfitrión Daniel Noboa.
A pesar de ello, Felipe VI destacó la importancia de haber llegado a este encuentro, incluso en un "momento complejo".
El llamado a fortalecer la unidad y superar desafíos quedó como el eje principal de esta cumbre, con el compromiso de los países presentes de mantener viva la visión de una Iberoamérica más fuerte y conectada.
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